Reseña sin spoilers: "Una película de Minecraft", una adaptación decepcionante
Después de 11 años desde que el creador de "Minecraft", Notch, anunciara en Twitter que estaba en conversaciones con Warner Bros. para realizar una película basada en el juego, finalmente "Una película de Minecraft" llegó ayer a los cines.
Dirigida por Jared Hess ("Nacho Libre"), la historia sigue a cuatro inadaptados: Garrett "El Basurero" Garrison (Jason Momoa), Henry (Sebastian Hansen), Natalie (Emma Myers) y Dawn (Danielle Brooks). Mientras lidian con sus problemas cotidianos, descubren un misterioso cubo que los transporta a un mundo de fantasía hecho completamente de bloques.
Tras un accidente, el cubo que los llevó allí se rompe, por lo que deben encontrar la pieza que lo reparará y así reactivar el portal para regresar a casa. En su aventura, se les une Steve (Jack Black), quien les mostrará las maravillas de este extraño mundo y los ayudará a encontrar el camino de vuelta.
Un aspecto que merece destacarse es el apartado visual. Para el tipo de película que es, está muy bien trabajado. Aunque esta historia no debía ser live-action con un estilo realista, lograron traducir de manera efectiva la estética del juego a este formato.
El primer acto funciona a medias: introduce a los personajes y el conflicto principal, pero la razón por la que entran al mundo de "Minecraft" carece de lógica. Además, presenta una subtrama secundaria apenas mencionada en los tráileres: la de un aldeano que cruza el portal y llega al mundo real.
Esta subtrama no aporta nada a la película y su presencia es breve. Aunque parece un intento de añadir un toque cómico, su inclusión resulta innecesaria.
El segundo acto es el más sólido de los tres. Aquí se desarrolla la dinámica entre los protagonistas, y Jack Black brilla con su actuación, llevándose la película. Las interacciones entre los personajes de Jack Black y Jason Momoa son naturales; la química entre los actores es evidente, y se nota que disfrutaron el rodaje.
Sin embargo, el resto del elenco no corre con la misma suerte. El personaje de Sebastian Hansen, quien podría considerarse el protagonista principal, se siente desplazado en este segundo acto. Mientras tanto, los personajes de Emma Myers y Danielle Brooks tienen una participación mínima, ya que la mayor parte del tiempo en pantalla la acaparan los otros tres personajes.
El tercer acto es, sin duda, el punto más débil de la película y el que la arruina por completo. El final es apresurado y adopta un tono estilo "Avengers", lo que genera un problema importante: altera drásticamente el ritmo de la historia. Mientras que los dos primeros actos mantienen un tono aventurero y cómico, este cierre repentino se siente como una versión improvisada de "Avengers: Endgame". Dado el escaso desarrollo de los personajes, el desenlace resulta aún más forzado y anticlimático.
Otro aspecto destacable es la banda sonora, que rinde homenaje al soundtrack original del videojuego, compuesto por C418. Además, incluye canciones interpretadas por Jack Black y una pieza de la banda Dayglow. Todas encajan bien en la película y sirven como un gran complemento.
En cuanto a su mensaje, la película busca transmitir la importancia de la creatividad y el valor de no temer ser creativos. También plantea que no debemos refugiarnos en un mundo de fantasía para evitar afrontar los problemas de la vida real.
Sin embargo, aunque estos mensajes tienen potencial, la película no les dedica suficiente tiempo para desarrollarlos, ya que prioriza el humor y un final extraño.
"Una película de Minecraft" destaca por sus efectos visuales, aunque su estilo realista choca con la estética pixelada del videojuego. Como adaptación, es decente, aunque no completamente fiel al material original, ya que introduce libertades creativas que no existen en el juego.
El humor funciona en ciertos momentos, pero en otros resulta forzado. En general, la película es un intento fallido de construir una historia dentro de este vasto mundo. Desde hace años, los fanáticos han logrado mejores adaptaciones en distintos formatos transmedia, como cortometrajes y otras historias.
"Minecraft" no tiene una historia definida, pues es un juego sandbox en el que los jugadores crean sus propias experiencias. Sin embargo, ya existía un videojuego narrativo: "Minecraft: Story Mode". Personalmente, habría preferido una adaptación de ese título en lugar de lo que nos presentaron.
Otro problema es el doblaje, que presenta inconsistencias en la traducción de términos del videojuego y el uso de modismos que se sienten fuera de lugar. La elección de voces también es cuestionable, especialmente en el caso del personaje de Jack Black, cuya voz en español no encaja bien. Además, la participación del youtuber Bobicraft deja mucho que desear. Entiendo que Warner Bros. quiso incluir a un creador de contenido relacionado con Minecraft, pero había opciones más adecuadas para el papel.
En conclusión, "Una película de Minecraft" es una adaptación decepcionante, con un final flojo. Aunque se nota el esfuerzo de Mojang por respetar el material original, esto no la salva de la mediocridad. En última instancia, será una más en la lista de adaptaciones de videojuegos que quedarán en el olvido.
Aun así, los fanáticos del juego podrán disfrutarla gracias a la gran cantidad de referencias y easter eggs que contiene.